lunes, 12 de diciembre de 2016

El nombre del viento 2.0



Pues lo prometido es deuda, finalmente terminé de leer el libro y junte un par de frases que les compartiré a continuación. No se describir la sensación o el sentimiento al terminar el libro, pero si les aseguro que me dieron unas ganas tremendas de continuar con la segunda parte. Bueno, sin más rodeos les comparto las siguientes frases y pensamientos:

“Esa mujer te partirá el corazón. Los hombres caen por ella como el trigo ante la hoja de una guadaña”.

“Mira las mujeres con como el fuego, como las llamas. Algunas son como velas, luminosas e inofensivas. Algunas son como chispas, o como brasas, o como luciérnagas que perseguimos las noches de verano. Algunas son como hogueras, un derroche de luz y de calor por una sola noche, y quieren que después las dejen en paz. Algunas son como el fuego de la chimenea: no muy espectaculares, pero por debajo tienen cálidas y rojas brasas que arden mucho tiempo. Pero “ella” …Ella es como cascada de chispas que sale de un afilado cuchillo de hierro que Dios acerca a la piedra de afilar. No puedes evitar mirar, no puedes evitar desearla. Hasta es posible que acerques una mano durante un segundo. Pero no puedes dejarla allí. Te partirá el corazón…”

“Una tarde, cuando era niño, me pase una hora persiguiendo el arco iris. Me perdí en el bosque. Mis padres estaban desesperados. Yo estaba convencido de que podría atraparlo. Creí ver el sitio donde tocaba el suelo. Contigo me pasa lo mismo…”

“Es como la vida misma, nos gustan las cosas dulces, pero necesitamos las amargas”.

“Las palabras pueden hacer prender el fuego en la mente de los hombres. Las palabras pueden arrancarles lágrimas a los corazones más duros”.

“Yo la conozco desde hace más tiempo. Si, tú has estado entre sus brazos, has probado el sabor de su boca, has sentido su calor, y eso es algo que yo nunca he tenido. Pero hay una parte de ella que es sólo para mí. Tú no puedes tocarla, por mucho que te esfuerces. Y cuando te deje, yo seguiré estando aquí, haciéndola reír. Y mí luz brillará en ella. Yo seguiré estando aquí mucho después de que ella haya olvidado tu nombre”.

“Ella es como una tormenta de verano. Si una tormenta derribara tu casa, o derribara un árbol, no diría que la tormenta es mala. Era cruel. Actuó conforme a su naturaleza y, desgraciadamente, produjo daños. Con ella pasa lo mismo”.

Continuaremos con la segunda parte: El temor de un hombre sabio.

No hay comentarios:

Publicar un comentario